de : Enrique Jaramillo Levi

Barco a la deriva

Enrique Jaramillo Levi

Hay que salvar la nave,
su tripulación,
el cargamento.
Sálvala tú que sabes el oficio,
que puedes tranquilizar el desorden
de las máquinas y el fragor de las olas
con el simple roce de tus dedos,
con el bálsamo de una sonrisa.
No permitas que naufrague
este terco barco a la deriva.
Ofrécele al final tu puerto,
condúcelo
a su muelle húmedo,
y verás cómo se aquieta
este incendio voraz
que me consume.

Barco à deriva

Temos de salvar o navio,
sua tripulação,
e o carregamento.
Salva tu que conheces o ofício,
que podes tranquilizar a desordem
das máquinas e o fragor das ondas
com o simples toque de teus dedos,
com o bálsamo de um sorriso.
Não permita que naufrague
este singelo barco à deriva.
Ofereça-lhe ao final teu porto
leva-o
a tua doca
e verás como se acalma
este incêndio voraz
que me consome.